Todo cambia y está bien

Se termina el 2022…

Escribí mi último post por acá en enero de este 2022. Pensé que me tomaría un par de meses para regresar, que el cansancio cedería en algún momento y sí pasó en realidad, me sentí mejor un tiempo. Pero otra avalancha de trabajo llegó y traté de sobrellevar de la mejor manera las tareas, actividades y compromisos.

Este proyecto está estrenando dominio. Si miran con cuidado la página termina en .net y antes era .com. Adicionalmente cambié de plataforma y servidor, quizá esto pareciera poco relevante, pero para mí no lo fue. Me explico: Cuando era joven, tuve un blog que escribí de 2008 a 2014, la plataforma que use era blogger de Google. La interfaz nunca me gustó del todo, pero era muy sencilla y aprendí muchas cosas en el proceso. Posteriormente bajé de la red esa bitácora personal y pensé que si regresaba algún día a hacer un blog, lo haría en una plataforma diferente.

Busqué una opción sencilla y encontré Wix. Les cuento esto, porque si ustedes quieren hacer una página de internet, Wix es muy sencillo y el primer plan es barato. Pero sucede que cuando termina el plan de ahorro, los costos se elevan considerablemente y quizá tenía muchas incertidumbres sobre el rumbo de este proyecto, pero si tenía la certeza de que seguir en esa plataforma web no era una opción viable para mi bolsillo.

Contraté un plan rebajado por dos años y pensé que en ese tiempo, me daría tiempo de tomar algunos cursos para usar la plataforma de WordPress (Mi yo del pasado era un poco ilusa), porque lo postergué tanto que llegó el fin de mi plan y yo ni idea de qué haría. Les contaré más delante las cuestiones técnicas a las que me enfrenté, ya que no sólo el cambio de dominio, sino la nueva interfaz representó un desafío. Además que el traslado de contenido me llevó un tiempo considerable.

Así pues, nunca abandoné este blog, solamente me mudé de plataforma y aunado a ella, mi vida cambió este año. Fue un cambio extraño y sigo aprendiendo. Más adelante les seguiré contando, mientras les hago un resumen de lo que representó este 2022

Cosas que hice en el primer semestre del año

  • Dar clases
  • Cuidar a mis perros y gatos
  • Sistematizar información
  • Reaprender la plataforma del blog (hacer un par de cursos para entender la nueva interfaz)
  • Seguir con mi tratamiento médico
  • Descansar
  • Trabajar un dossier
  • Abrazar a mis afectos
  • Despedirme de mi amiga perruna que murió en junio

El segundo semestre…

Fue un caos, la verdad. No estaba preparada para el cambio en mi trabajo (hasta ese momento era virtual y se basaba primordialmente en la investigación). Ahora, frente a mi, estaba la gestión académica y yo no sabía nada. De agosto hasta diciembre mi día a día consistía en: tratar de entender procesos, enfrentar urgencias, atender peticiones cotidianas y tratar de equilibrar el trabajo en la oficina con proyectos de investigación, clases en diversos niveles y la escritura académica.

Todo lo anterior, tratando de cumplir mi meta del 2022: no llegar al límite de mis fuerzas. Por tal razón, todo iba lento en este espacio. Nunca abandoné, sólo iba muy lenta en el traslado de contenido. Acá andamos y espero seguir con más fuerza para el próximo año.

Ojalá me acompañen en estos cambios. Si quisieran compartir algo, escríbanme un correo, será un gusto leerles.

Agradezco el tiempo que has dedicado a estas palabras y nos vemos pronto.

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